Permiso de EEUU acelera proyecto de cable eléctrico entre RD y PR
El proyecto que ha capturado la atención del público por su carácter inédito, llevar electricidad desde República Dominicana a Puerto Rico mediante un cable submarino, avanza en materia de permisos.
El director de Caribbean Transmission, Tirso Selman Rivera, informó que la aprobación de los permisos ambientales federales de los Estados Unidos necesarios para su ejecución progresa de manera favorable y podría concretarse en noviembre de este año.
Selman Rivera aseguró a Diario Libre que esta autorización constituye un hito crucial para la construcción y operación de la infraestructura energética internacional, cuyo costo de inversión inicial ronda los 1,000 millones de dólares, con una inversión total de 2,000 millones.
“Actualmente estamos en etapas avanzadas de evaluación por parte de las autoridades federales estadounidenses, y esperamos tener en noviembre el permiso definitivo. Este visto bueno permitirá comenzar inmediatamente los procesos de adquisición de equipos especializados y avanzar con la instalación del cable submarino”, explicó.
La planta en RD
Según detalló Selman, la decisión de instalar la planta en República Dominicana responde a criterios estratégicos. Destacó la mayor disponibilidad de terrenos, sus menores costos y un proceso más eficiente para la tramitación de permisos ambientales y de construcción. En contraste, afirmó que en Puerto Rico el mismo proceso podría extenderse hasta seis años.
“Puerto Rico enfrenta limitaciones de espacio y una topografía muy accidentada, lo que complica considerablemente la instalación de infraestructuras energéticas. Además, estadísticamente tiene mayor incidencia de huracanes, lo que compromete la estabilidad y continuidad del servicio eléctrico en situaciones de emergencia”, agregó.
La planta se construirá entre las provincias San Pedro de Macorís y La Romana. Tendrá una capacidad de generación de 700 megavatios térmicos y contará con un complemento de 200 megavatios en energía solar. El combustible que se utilizará inicialmente será gas natural y estará certificada para operar con hidrógeno verde.
“El proyecto es estratégico y beneficioso para ambos países”, afirmó Selman. Enfatizó su potencial para generar empleos, atraer inversión extranjera y aportar divisas a la economía dominicana, además de fortalecer la estabilidad energética de la región.
En su primera fase toda la energía será exportada hacia Puerto Rico.
Caribbean Transmission trabaja con asesores ambientales locales para avanzar en los estudios requeridos en República Dominicana. La empresa busca asegurar el cumplimiento de las normativas y facilitar la obtención de los permisos correspondientes en suelo nacional. De acuerdo a informaciones de los promotores del proyecto, durante la primera fase toda la energía que se produzca en la planta, que operará inicialmente con gas natural y tendrá capacidad de generar 700 megavatios térmicos, se venderá en Puerto Rico.