Desaparecidos en RD: buscan a Crysbelis Suero, de 12 años

Posted by
Category:

Milvian Rodríguez buscó cinco pesos para que su hija Crysbelis Suero Rodríguez, de 12 años, completara un dinero con el que quería “comprar un dulce al colmado”, el sábado 17 de mayo, a las 4:00 de la tarde. Minutos después, Milvian notó que el colmado estaba cerrado: la niña habría doblado la esquina y se habría ido “con alguien que la estaba esperando”, según le comentaron testigos.

Sin comer, ni dormir, la joven madre la ha buscado desesperadamente junto a sus vecinos en el sector La Ureña, en Santo Domingo Este, sin más pistas que una llamada que habría recibido al día siguiente, el domingo a las 8:00 de la noche, en la que escuchó a Crysbelis decirle que no se preocupara, que ella “se había casado”.

“Yo no le creo. Yo sé que es mentira”, insistió Milvian, quien asegura que su hija solo se relacionaba con sus compañeros de escuela y con su sus familiares paternos, sobre todo su abuela.

Ella no tiene idea de con quién se habría ido, y teme que esté en manos de un desaprensivo que abuse de ella o ponga en riesgo su vida. 

Cuando fue a la policía, le dijeron que ya el caso “estaba en sus manos” y que ellos se iban a “mantener en búsqueda”. Sin embargo, al acudir a la fiscalía de su comunidad, la fiscal le dijo que debía darle “mínimo 20 días laborales” antes de emitir una orden de arresto a algún sospechoso.

“Yo tengo entendido que es mucho tiempo. Ya una persona en 20 días anda unos cuantos países», deploró.

«Yo entiendo que las autoridades, la justicia, no pueden hablar de esa manera donde se está hablado de que una menor está desaparecida, sin uno saber ningún rastro de ella, si uno saber si está viva, si está muerta, porque del domingo a hoy hace muchos días”, agregó la madre, visiblemente angustiada.

Ella asegura que ha insistido con la Fiscalía, con la Policía Antipandillas y con la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim), sin tener respuestas hasta el momento.

Fingió estar presa, pero no volvió

Al recibir la llamada de Crysbelis, Milvian le dijo que su familia paterna la había apresado tras no recibir noticias sobre su paradero, para atemorizarla y lograr que la niña volviera.

En cambio, su hija pidió pruebas, por lo que Milvian fue al destacamento más cercano a su casa y fingió haber estado arrestada, poniéndola a conversar por teléfono “con un comandante del Dicrim” ahí presente.

Por una videollamada, Crysbelis le pidió al comandante soltar a su madre, asegurando que ella “no tenía nada que ver con cómo ella estaba” y dijo que volvería con la condición de que su hermana paterna tampoco se enterara de lo que había sucedido.

Milvian recuerda que en esa llamada su hija estaba muy nerviosa: se comía las uñas, hablaba con voz temblorosa y miraba hacia los lados. “Estaba en una casucha, era un parapete de zinc”, recuerda Milvian.

Cuando la llamada culminó, Milvian se quedó esperando, pero Crysbelis no volvió a la casa, ni se presentó en el destacamento.

Sospecha que la hija mayor de su expareja y hermana de crianza, pudiera saber algo del paradero de Crysbelis, debido a que tuvieron contacto esa noche por teléfono, luego de llamar a la policía, y la hermana ha evitado «dar la cara», negando conocer su paradero.

“De ahí para acá, más nunca hemos dado con nada de la niña”, lamentó.

Milvian pidió que cualquier persona que tenga conocimiento de dónde habría podido ir su hija, que se comunique con ella al 809-940-8649 y 829-425-9595.

Deja una respuesta

Este sitio web utiliza cookies y solicita sus datos personales para mejorar su experiencia de navegación.