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República Dominicana se prepara para enfrentar uno de los mayores arribazones de sargazo en su historia reciente. Con más de 31 millones de toneladas flotando hacia la región, autoridades, científicos y el sector turístico encienden las alarmas ante un fenómeno que se agrava con el cambio climático.

Desde hace más de una década, las costas del Caribe han sido invadidas de manera intermitente por grandes cantidades de sargazo, una macroalga marrón que, aunque vital para el ecosistema marino en alta mar, se convierte en una pesadilla cuando llega a tierra firme.

Este 2025, el panorama no es alentador. Según informes recientes de la red de observación de sargazo de la Universidad del Sur de Florida, más de 31 millones de toneladas se desplazan desde el océano Atlántico hacia las playas del Caribe, Florida y el Golfo de México. Es una cifra récord que pone en jaque a las autoridades medioambientales y turísticas de la región.

2025, un nuevo récord de sargazo

El informe mensual de la Universidad del Sur de Florida indica que la cantidad de sargazo aumentó considerablemente en mayo en cada región.

“La cantidad total de sargazo de todas las regiones combinadas aumentó de 31 millones de toneladas en abril a 37,5 millones de toneladas en mayo, estableciendo un nuevo récord”, dice el informe.

Además, respecto al futuro cercano, se prevé que en junio continúe el aumento en la mayoría de las regiones, como en años anteriores.

¿De dónde viene el sargazo y cómo se forma?

El sargazo que afecta al Caribe no proviene de una sola fuente. Su origen se encuentra principalmente en el Mar de los Sargazos, una zona ubicada en el Atlántico Norte. Sin embargo, desde 2011 se ha observado la formación de un nuevo «cinturón de sargazo» que se extiende desde África Occidental hasta el Golfo de México. Este crecimiento se debe a una combinación de factores naturales y antropogénicos: el aumento de nutrientes procedentes de los ríos Amazonas y Congo, la deforestación, el uso intensivo de fertilizantes agrícolas, y el calentamiento global, que ha elevado la temperatura del agua.

Las algas prosperan con estas condiciones, y luego de formarse en alta mar, son arrastradas por las corrientes oceánicas hacia el Caribe y sus islas, incluyendo a la República Dominicana.

Impacto directo en el turismo dominicano

La llegada del sargazo representa una amenaza directa para el principal motor económico del país: el turismo. Las playas cubiertas de estas algas desprenden un olor fétido a huevo podrido debido al sulfuro de hidrógeno que emiten al descomponerse, y su acumulación afecta tanto la estética como la experiencia del visitante.

En años anteriores, como en 2018 y 2022, la presencia masiva de sargazo obligó a cerrar temporalmente algunos balnearios en Punta Cana, Bayahíbe y La Romana. Los hoteles se vieron forzados a invertir en barreras marinas, cuadrillas de limpieza y maquinaria para retirar toneladas de algas, mientras los turistas buscaban alternativas en otras regiones.

El fenómeno del sargazo amenaza de forma directa al turismo, pues puede significar la disminución de reservas en hoteles del país. Este año, ante la magnitud del fenómeno, la preocupación ha vuelto: este lunes, el presidente Luis Abinader solicitó ayuda a la comunidad internacional durante su intervención en el marco de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos (UNOC3) en Francia, calificando el sargazo como una emergencia ambiental regional.

Según estimaciones citadas por el presidente, entre 0.62 y 0.93 millones de toneladas métricas de sargazo podrían llegar este año a República Dominicana. “En un escenario extremo, este valor podría superar el millón de toneladas”, advirtió Abinader.

El sargazo también es perjudicial para el medio ambiente. José Ramón Reyes, viceministro de Costeros y Marinos, explicó a Diario Libre que actualmente Barahona está en estado de emergencia. “Estamos retirando el sargazo para que no suceda lo que que sucedió hace dos años, cuando cientos de miles de peces murieron por la falta de oxígeno”, informó Reyes.

Sargazo en República Dominicana. (DIARIO LIBRE)

Las playas públicas, las más vulnerables

A la hora de enfrentar el sargazo, las playas privadas de los hoteles y complejos turísticos suelen tener maquinaria y personal dedicado a hacer frente a la invasión. Por esto, las playas públicas son las más vulnerables.

“En las playas públicas tenemos plan para las recogidas”, confirmó el viceministro. Para afrontar el sargazo, “tenemos brigadas”, añadió. De cara al futuro, además, hay un plan, pero no podrá implantarse este año, explicó Reyes.

“Con cooperaciones internacionales se empezarán a instalar mallas en las playas”, confirmó.

Llamados a la calma y la preparación

Mientras algunos medios internacionales advierten de un desastre inminente, expertos y agencias de viajes recomiendan no caer en el alarmismo.

Según la Asociación de Agencias de Viaje del Caribe, la llegada del sargazo no es uniforme y muchas playas siguen libres de algas. Además, se están aplicando protocolos de monitoreo en tiempo real para anticipar las áreas más afectadas.

A pesar de las estrategias de mitigación, como las barreras flotantes o el uso de embarcaciones para recolectarlo en mar abierto, el sargazo sigue siendo un problema complejo y cambiante. La clave, insisten los especialistas, está en la cooperación regional, la inversión en investigación científica y la educación ambiental.